El 24 de agosto de 2020, los 27 paises miembros de la Unión Europea negaron su reconocimiento a Aleksandr Lukashenko como presidente legítimo de Bielorrusia. A través de un comunicado, los líderes de la coalición continental argumentaron que la continuidad de este gobierno “contradice directamente la voluntad de una gran parte de la población bielorrusa, tal como ha sido expresado desde la elección a través de numerosas protestas pacíficas sin precedentes, y solamente sirve para profundizar la crisis política en Bielorrusia” y acusaron a las elecciones del pasado 9 de agosto de fraudulentas
Lukashenko asumió el poder ejecutivo de la nación exsoviética por sexta ocasión el día 23 de septiembre de 2020 tras reportar haber recibido el 80% de los votos en los comicios electorales de agosto, hecho que suscitó una fuerte ola de protestas e inconformidad en dicho país y a nivel internacional y una respuesta represiva por parte del gobierno. Tan solo en mayo y junio, Amnistía Internacional reportó la detención de al menos mil 100 protestantes pacíficos por apoyar a candidatos de la oposición.
Desde entonces y previo a la elección, el gobierno bielorruso ha sido responsable de numerosas detenciones motivadas políticamente incluyendo la de sus contrincantes en la elección Viktor Babariko y Serguéi Tijanovski. Svetlana Tijanóvskaya, esposa de este último, tomó la candidatura tras su arresto y afirma haber obtenido el 60% de los votos en la elección, pese a lo dicho en los resultados oficiales. En conjunto con otros miembros importantes de la oposición, fundó el Consejo de Coordinación (CC) de Bielorrusia con miras a buscar revertir los resultados fraudulentos. Todos los miembros del CC, incluyendo Tijanóvskaya y con la excepción de la escritora Nobel Svetlana Aleksiévich, se encuentran bajo arresto o exiliados de su país.
Junto a la Unión Europea, países como Estados Unidos y Ucrania han desconocido la legitimidad del gobierno de Lukashenko. Pese a esto, tanto Wang Wenbin, vocero del Ministerio de Exteriores de la República Popular China, como Vladimir Putin, presidente de Rusia, anunciaron a los medios sus respectivos respaldo al régimen; este último declarando esperar que “su actividad estatal contribuya a un mayor desarrollo de las relaciones ruso-bielorrusas mutuamente beneficiosas en todas las áreas”. Aleksandr Lukashenko, quien ha sido llamado “el último dictador de Europa”, inauguró su sexto periodo de gobierno consecutivo el día 23 de septiembre de 2020.
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