Cada fin de año, parvadas que suman hasta 20 mil pelícanos blancos arriban a Michoacán procedentes de Canadá y Estados Unidos, brindando un espectáculo natural único para visitantes y turistas.
Y en esta temporada, los llamados pelícanos borregones han iniciado su arribo.
La Secretaría del Medio Ambiente, Cambio Climático y Desarrollo Territorial en Michoacán, informó que en su trayecto a esta entidad, las aves vuelan un promedio de 500 kilómetros diarios, a una altura superior a los 3 mil metros.
En grupos, llegan al lago de Chapala para posarse en las inmediaciones de la isla de Petatán, perteneciente al municipio de Cojumatlán de Régules.
El clima húmedo y la alta disponibilidad de mojarras y carpas, así como la existencia de comercios que generan desechos de pescado, garantizan a esta ave suficiente alimento y la permanencia durante este periodo invernal.
Las autoridades lo consideran uno de los fenómenos migratorios emblemáticos de la entidad, al igual que el de la tortuga marina y la mariposa monarca.