La cultura mexicana está sumamente ligada a mitos, leyendas y cuentos, la mayor parte de estas, relacionadas con fantasmas, demonios y espíritus. Esto, a lo largo del tiempo, ha generado un nutrido acervo de películas basadas o inspiradas en este tipo de relatos fantásticos.
Si bien, el cine mexicano de terror no cuenta con la difusión que tienen películas consideradas clásicas dentro del género, el país ha producido una gran cantidad de filmes con extraordinarios elementos cinematográficos. Cuyas tramas y argumentos destacan por su cercanía con la cultura popular, ya sea que hayan sido hechas el siglo pasado o durante el siglo XXI.
Una de las películas mexicanas con mayor reconocimiento entre aficionados al cine de terror es “Hasta el viento tiene miedo” (1968). El director de esta,Carlos Taboada, es considerado por la crítica cinematográfica como uno de los representantes más relevantes del cine de terror en México. El filme, protagonizado por Marga López y Maricruz Olivier, cuenta la historia de un grupo de adolescentes, quienes se percatan de la presencia de un espíritu en el internado donde habitan.
“Alucarda, hija de las tinieblas” es probablemente la película de culto más representativa del cine mexicano. Esta cinta fue la segunda producción de Juan López Moctezuma, para la cual se basó libremente en la novela “Carmilla” de Sheridan Fanu. La narración se centra en Justine, una huérfana que llega a vivir a un convento, en donde conoce a una joven llamada Alucarda. La inocente relación entre ambas se torna en deseo y tras realizar un pacto de sangre, los sacerdotes y monjas las someten a torturas y exorcismos. Sin embargo, esto desata una serie de sucesos trágicos, relacionados con herejías, posesiones y paganismo.
Aunque Alejandro Jorodowsky es reconocido por su trabajo simbólico y con fuerte crítica hacia la política, también incursionó en el cine de terror con “Santa Sangre” (1989). Pero como en el resto de sus producciones, esta se mantiene apegada a una fuerte dimensión psicoanalítica. El filme sigue la historia de Fénix, un joven recluido en un hospital psiquiátrico debido a un trauma de su infancia. Pues en el pasado vio a su padre amputar los brazos de su madre, quien era líder de un culto llamado Santa Sangre. Tras escapar de su reclusión, Fénix se reúne con su madre y en contra de su voluntad queda a su merced.
“Belzebuth” (2017), cuarto filme de Emilio Portes, actualiza el cine del terror en México mediante la resignificación de un tema de gran relevancia en el país, la migración. La película gira en torno a una serie de infanticidios en la frontera de México, lo cual parece estar relacionado con un antiguo demonio. Ante ello, el investigador Emannuel Ritter hace una profunda indagación, llegando inclusive a enfrentarse a sí mismo. Dicha producción es una de las películas que gozó con mayor impacto en cuestión de audiencias dentro del cine nacional. Pues se estima, alcanzó en taquillas cerca de 720 mil espectadores.
Dentro de las películas más recientes del género, “Huesera“ (2022) despuntó en el panorama internacional al desmitificar temas como la maternidad, los roles conyugales y la familia. La opera prima de Michelle Garza Cervera ganó el premio a mejor Dirección y Revelación en el Festival de Cine de Fantástico de Cataluña y participó en Festivales en Toronto, Lima y Corea. El filme relata la historia de Valeria, una mujer que lleva un tiempo tratando de tener un hijo, sin embargo, cuando queda embarazada, una extraña presencia comienza a acecharla. Sacando a la luz el pasado de la joven y poniendo en riesgo su estabilidad familiar y el futuro de su bebé.
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