A través de un comunicado, la organización no lucrativa World Central Kitchen informó que siete de sus miembros murieron en un bombardeo perpetuado por las Fuerzas de Defensa de Israel contra una de sus unidades. A su vez, la organización argumenta, este ataque evidencia como las fuerzas armadas de Israel hacen uso de los alimentos como “arma de guerra”.
Eso no es solo un ataque contra WKC, es un ataque contra las organizaciones humanitarias que aparecen en las situaciones más extremas, en donde los alimentos se usan como arma de guerra”, anunció WCK.
Mediante un comunicado, la ONU denunció anteriormente el “uso de inanición como método de guerra” por parte de Israel. Esto ya que el país, en su posición de potencia ocupante, incumplió con los estatutos de la legislación internacional sobre los derechos humanos de garantizar el suministro de alimentos y facilitar la labor de organizaciones para ayudar a la población civil. Pues Israel no garantizó la seguridad de centros de estabilización de malnutrición de emergencia de la ONU en Hamás, obstruyendo así la instalación de los mismos.
Así, las acciones de Israel, sumadas al ataque de la WKC, refuerzan la acusación del uso de alimentos como arma de guerra, ya que el país muestra intenciones de evitar la ayuda humanitaria de diferentes organizaciones internacionales hacia la población en Hamás que sufre de desnutrición. Cabe destacar, según información de la ONU, el número de niños y recién nacidos al borde de la muerte debido al hambre aumentó en el territorio.
En el comunicado, WKC explica, la FDI tenía conocimiento de la operación de la organización para llevar ayuda humanitaria a pobladores de Gaza y el vehículo que transportaba la WKC se encontraba marcado con el logotipo de la asociación. Pese a lo cual, las fuerzas armadas llevaron a cabo el bombardeo, resultando en la muerte de trabajadores humanitarios. Por lo cual, de acuerdo con la FDI, se está llevando a cabo un examen de profundidad “para comprender las circunstancias del trágico incidente”.
Tras el ataque, WKC anunció su decisión de detener sus operaciones en la región sin tomar aún una determinación sobre el futuro de la organización. Cabe resaltar, WKC es una organización internacional sin fines de lucro fundada en 2010, dedicada a la distribución y preparación de alimentos en zonas afectadas por crisis comunitarias, climáticas y humanitarias.
Referente con el bombardeo dirigido a la unidad de WKC, la ONU emitió un comunicado a través de X. En el cual afirman, este no es un “incidente asilado”, pues desde 2023 hasta el 20 de marzo de 2024 fueron asesinados 196 trabajadores humanitarios en territorios palestinos ocupados por Israel.
“La muerte de trabajadores de WKC, mediante ataques israelíes, ha sido condenada energéticamente por los funcionarios de la ONU, quienes reiteraron su preocupación por que no quede ningún espacio seguro en Gaza”. Junto con este señalamiento, la ONU exigió a las autoridades de Israel respetar el Derecho Internacional Humanitario, el cual prohíbe atacar a personas que distribuyen ayuda humanitaria.
Del mismo modo que WKC, la ONU explica, la unidad de la organización contaba con señalizaciones, además de que las autoridades israelíes habían sido informadas de la operación para distribuir alimentos. La ONU aprecia este ataque y los continuos bloqueos a la ayuda humanitaria como una vulneración de Israel hacia el Derecho Internacional Humanitario. Además, la entidad, basándose en el proceder de Israel, considera que no existe intención de acordar un alto al fuego. Por lo cual, hace un llamado a proteger los derechos de los trabajadores humanitarios.