Agricultores tlaxcaltecos se unen para defender la soberanía del maíz nativo, en la batalla contra los cultivos transgénicos en todo el territorio nacional.
En el municipio de Españita, los habitantes de la comunidad de Vicente Guerrero aprendieron a domesticar diferentes especies de maíz y, desde hace 23 años, conmemoran la importancia de esta gramínea con La Feria del Maíz y otras semillas.
Este año, diversos campesinos ofrecieron productos y artesanías que giran en torno a la emblemática semilla nacional, entre ellos, María Félix Nájera Rodríguez, de 84 años originaria de Españita.
Mencionó que este año una sequía afectó sus cultivos, aunque sabe que no fue la única perjudicada de la región.
Por su parte, José Guzmán, del poblado de San Antonio Atotonilco, expone diferentes tipos de maíz, que siembra por temporal; es decir que al no tener un sistema de riego en sus milpas, las abastece con la poca agua de lluvia que llega en el año, señala.
Indicó que fue una bendición que este invierno no helara, porque de lo contrario habría perdido parte de su producción.
En otro punto, originarios de San Francisco Tetlanohcan, como Eutequio Zelocuatecatl Sánchez y María Ascensión Cuapio Rodríguez, ofrecen hoja de maíz, pinole y maíz con piloncillo. Comentaron que estos productos forman parte de la cosecha que obtuvieron, pese a la escasez de agua y la contaminación del suelo por otras actividades y el peligro de los talamontes, que acechan los alrededores de sus tierras.
Eutequio decidió trabajar en el campo junto a su esposa en la siembra de rábano, huauzontle, zanahoria, espinaca, cebolla y chile, elementos estos dos últimos que no pueden faltar en su cocina porque “una buena salsa todo mejora”.
Para enfrentar las adversidades del campo, en la comunidad de Vicente Guerrero un grupo de pobladores creó una asociación civil homónima, que busca recuperar el amor por el campo y la semilla emblema de la dieta nacional.
Este año la Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad (Conabio), motivó a diferentes agricultores de la Ciudad de México a participar en la feria, con el propósito de conectar a los diferentes productores de ambas entidades y lograr un intercambio de experiencias entre ambos agricultores.
Entre otras actividades que realiza la comunidad de Vicente Guerrero destaca la orientación a los campesinos sobre las diferentes agroecologías que ayudan al mejoramiento de los cultivos, para que obtengan mejores productos.
Rogelio Sánchez, integrante de la agrupación, enfatizó que estas prácticas se relacionan con el cuidado del medio ambiente y los recursos naturales.
Apuntó que han hecho de la Feria del Maíz una manera de resistir a los cultivos híbridos, a través del intercambio de conocimiento entre los campesinos.
Por su parte, Pánfilo Hernández Ortiz, especialista en prácticas agroecológicas, consideró que las diferentes labores que realiza la comunidad de Vicente Guerrero sirven para recuperar los suelos y motivar a otros productores locales a sumarse a la conservación del maíz criollo o nativo, a fin de obtener una soberanía alimentaria.
