Por Jesús Zambrano Grijalva
Presidente Nacional del PRD
Después de las festividades en familia y los buenos deseos de un año nuevo donde a todos nos vaya mejor, llega la cruda realidad, de los problemas que sigue enfrentando nuestro país y que este gobierno no ha sabido responder. Pero lo bueno es que tenemos una buena noticia, AMLO ya se va.
AMLO termina su sexenio este año dejando grandes retos. Seguimos observando las cifras escandalosas de más de 29 mil personas asesinadas el año pasado. Cifra que debería estar preocupando al presidente y a su gabinete en sus infructuosas reuniones mañaneras de su gabinete de seguridad. La inseguridad en este país es un tema no resuelto por más maromas y teatro que le ha estampado este gobierno, es una verdadera desgracia que en el último año de gobierno de López Obrador siga argumentando que la inseguridad es culpa de Felipe Calderón, “argumento” por demás absurdo e irrisorio.
Otro problema grave que enfrenta nuestro país es el tema de la migración y el papel que estamos desempeñando al ser el paso de miles de migrantes que cruzan por nuestra frontera sur para poder llegar a Estados Unidos en busca de mejores condiciones para ellos, ellas, y sus familias. Pero su paso por México se está dando en las peores condiciones, para empezar, los centros de atención migratoria son pocos, no tienen las condiciones necesarias para albergar a tantas personas, para darles atención médica u ofrecerles alimentos; aunado a ello, los migrantes están viviendo temas derivados de nuestra inseguridad al ser víctimas de robo, secuestro, extorción, e incluso ser asesinados. Por cierto, lamento mucho el secuestro de 31 migrantes en Tamaulipas, exigimos el esclarecimiento de los hechos y que esto no siga ocurriendo.
Otro gran problema que enfrenta México, y que este gobierno no ha hecho nada, es el de contar con un amplio y eficiente sistema de salud. Aunque vimos que se inauguró una “mega farmacia”, esto es, una bodega con algunos medicamentos, por cierto sin terminar, ni en adecuado funcionamiento; con dicha acción, no se solucionará el problema de acceso a la salud, de capacidad hospitalaria, de disponibilidad de medicamentos, el de contar con un servicio médico de calidad y accesibilidad para cada uno de las y los mexicanos que habitan todo el país.
Otro problema que no resultó, es el tema del crecimiento económico y empleos de calidad donde cada mexicano y mexicana tenga la posibilidad de acceder a uno, con salarios y condiciones dignas, ya que ante un presidente autoritario como lo es AMLO, nuestro país, no ofrece certeza jurídica a las grandes empresas y por ello temen invertir en nuestro país.
Como vemos, aunque cada ciudadano y ciudadana tiene la mejor intención y el deseo de que a México le vaya bien en este 2024, tenemos un presidente que se le ha olvidado su obligación constitucional de que a través de la rectoría del Estado en materia de desarrollo nacional garantice que éste sea integral y sustentable, que fortalezca la soberanía de la Nación y su régimen democrático y que, mediante la competitividad, el fomento del crecimiento económico y el empleo, y una más justa distribución del ingreso y la riqueza, permita el pleno ejercicio de la libertad y la dignidad de toda la ciudadanía.
Es lamentable que solo esté entrometido en el proceso electoral, en su sucesión, pretendiendo dejar a quien encubra su mal gobierno y continúe con sus prebendas y las de sus allegados que han llegado a enriquecerse en este sexenio con prácticas corruptas, autoritarias y plagadas de nepotismo, pero eso sí, bajo un sello redentor de una cuarta transformación, de una autoridad moral que, por supuesto, no tuvieron, eso de robar y mentir no fue lo suyo.
Por estos y muchos problemas más es que digo que el país tiene muchos retos que enfrentar, este gobierno no pudo con ellos, algunos los disfrazó, otros los agudizó y otros los provocó.
Así que tenemos la oportunidad, el próximo 2 de junio de este año, de terminar con una falsa transformación, con un movimiento que no estuvo a la altura de los problemas que enfrenta México y se la pasó improvisando, negando la realidad, mintiendo, victimizándose, ocultando y distrayendo la atención de los verdaderos problemas.
Tenemos la oportunidad de mejorar nuestro presente y futuro, de darle una solución a los problemas que aquejan a México y a los que habitamos en él, tenemos la oportunidad de terminar con un movimiento que tiene una visión autoritaria, que pretende acabar con la democracia y sus instituciones. Decidamos por un México mejor. Votemos por Xóchitl.Feliz fin