Sam Asghari, esposo de Britney Spears, decidió pronunciarse luego de que el portal TMZ reportara que la cantante sufrió un “colapso mental” en el restaurante JOEY en Woodland Hills.
El modelo empleó las historias de su cuenta de Instagram para defender a su famosa esposa escribiendo “no crean lo que leen en línea amigos”.
De acuerdo con el medio de espectáculos, la intérprete habría “hecho una escena” en el lugar que se encuentra en California, Estados Unidos, mientras estaba cenando con Sam el pasado viernes por la noche.
Según refiere la página web, testigos oculares aseguraron que la cantante de “Toxic” estaba actuando de manera extraña y “hablando sin sentido”, por lo que presuntamente Asghari habría salido enfurecido del restaurante sin ella.
Posteriormente se difundió un video en el que Spears aparece tapándose la cara con el menú mientras alguien de otra mesa la filmaba. El clip no mostraba a Britney hablando “incoherentemente” ni a su esposo dejándola sola.
Después del escándalo, Britney respondió en redes sociales a quienes la criticaron, con un video donde hace una seña obscena, y añadió una imagen con la frase “¡Me dijeron que no podía, por eso lo hice!”.
A su vez, el medio Page Six brindó un reporte distinto al emitido inicialmente, pues un empleado del restaurante declaró que el incidente no había sido causado por Britney, sino por un comensal que comenzó a grabarla sin su consentimiento.
Agencia México
