Por Luis Clemente Luna Lomelí
Han sido meses muy complicados, por la existencia de un virus, denominado como todos ya sabemos coronavirus, una de las medidas más utilizadas por los países en el mundo, para enfrentar este virus y evitar la propagación masiva del contagio, ha sido el mantener un aislamiento social, es decir mantenerse en cuarentena, si bien es cierto en países con una desigualdad social tan pronunciada, es inevitable mantener una cuarentena en estricto sentido, porque si no se muere por contraer el virus, se muere de hambre, esa es la triste y dolorosa realidad en nuestro país. Ahora bien, ha llegado el momento de que de manera escalonada, poco a poco regresemos a nuestras actividades y sobre todo es momento de retornar a una nueva normalidad.
Pero ¿qué implica esta nueva normalidad? Una nueva normalidad, tiene que ver con un regreso seguro y responsable a nuestra vida cotidiana, una nueva normalidad implica llevar a cabo de manera responsable y comprometida con nosotros y con nuestra sociedad, la medidas sanitarias, como el uso de cubrebocas, mantener la sana distancia, salir para lo más indispensable, una nueva normalidad significa construir una sociedad más justa, más cooperativa y sobre todo más empática, la nueva normalidad tiene que ver con la recuperación del tejido social, con el rescate de principios y valores que se han ido perdiendo, implica valorar lo poco o mucho que se tiene en nuestras vidas. De no ser así, y sobre todo el no actuar de manera responsable ante un virus que llego para quedarse, entonces no habremos aprendido nada.
El regreso a la nueva normalidad, no quiere decir que se debe bajar la guardia, al contrario se deberá estar más alertas que nunca, porque el riesgo de contagio seguirá latente, no será el momento de confiarse y dejar de cuidarse, sino seguir manteniendo las medidas, hasta por lo menos la llegada de una vacuna, la cual aún se ve muy lejos.
Asimismo una nueva normalidad significa, fortalecer nuestro sistema de salud, contar con más personal de salud, y sobre todo la construcción de un seguro médico universal que garantice la atención medica de calidad y gratuita a todos mexicanos, como el derecho que es, el cual debe ser garantizado por el Estado. La nueva normalidad implica invertir más en tecnología y que dicha tecnología sea utilizada para el fortalecimiento del sistema de salud. Es el momento de actuar con un gran compromiso social, haciendo cada quien lo que le corresponde, porque si no es así, estamos condenados a repetir la historia y no haber aprendido nada de esta crisis. Está en nosotros demostrar que somos ciudadanos comprometidos con nuestra sociedad y sobre todo comprometidos con nuestro país.
Por otro lado, hablar de una nueva normalidad, es hablar de que se tiene que colocar al centro de la agenda política, las diferentes problemáticas de carácter social y económico que profundizará más la pandemia, como lo son el desempleo, la pobreza, la desigualdad social.
El gobierno, estará obligado a la implementación de políticas públicas, que tengan el objetivo de atender de manera eficiente dichas problemáticas, implica construir una agenda económica, en donde la base de la recuperación económica, no solo sea el asistencialismo, sino un plan económico de rescate, el cual este acompañado de seguridad social para los inversionistas y que dicho sector vuelva a ver en México, como un país con un potencial de inversión, lo que generaría la recuperación de manera activa de la economía y al mismo tiempo, que se generen muchos empleos, en ese mismo sentido, el gobierno deberá lanzar una política efectiva para la recuperación del turismo, una vez que la pandemia ceda terreno, es importante señalar que una de las tres primeras entradas de ingreso para nuestro país es el turismo, detrás del petróleo y de las remesas.
Se tiene que tener clara la política económica, sería un grave error recurrir solo al asistencialismo, como hasta ahora lo ha hecho el gobierno federal, los efectos que dejará la pandemia deben ser sanos de manera eficaz y a la brevedad posible, por el bien de todos, por el bien de México.