Por Jesús Zambrano Grijalva
Presidente Nacional del PRD
Dice un famoso tango de Carlos Gardel “que es un soplo la vida, que 20 años no es nada”, pero parece que los argentinos de hoy piensan distinto. El domingo pasado, la ciudadanía de aquel país sudamericano se dio cita en las urnas para ponerle fin al par de décadas que gobernó el régimen de la rancia izquierda populista que hundió a la nación en una de sus peores crisis económicas incrementado los niveles de pobreza, el derrumbe de las empresas y la fuga de capital extranjero.
Sin embargo, el hartazgo de la ciudadanía impulsó la victoria del polo opuesto: un controversial candidato radical de derecha y populista, Javier Milei.
Obviamente no podemos congratularnos de la victoria de un ultraderechista, sin embargo, hay una serie de lecciones de la elección argentina que debemos tomar en cuenta las y los mexicanos:
- Las encuestas fallan: Ninguna encuesta pronosticó los más de 11 puntos de ventaja de Javier Milei sobre el candidato oficialista, Sergio Massa. Incluso, todos los estudios demoscópicos de la segunda vuelta electoral señalaban una ventaja significativa de Massa sobre Milei.
En la elección presidencial de Argentina las encuestas fallaron. En cambio, en México no es que fallen, sino que se están usando como estrategia propagandista con la intención de sembrar la idea de que la elección ya está definida y así aplastar el ánimo opositor.
Esta semana apenas comenzaron las precampañas en México, faltan siete largos meses para que se lleve a cabo la elección y no hay nada definido. La única certeza que tenemos al día de hoy, es que enfrentaremos una elección de Estado, en donde el gobierno en turno hará uso de todos sus recursos para imponer a su candidata, pero no se lo vamos a permitir. En México sí hay oposición y en la elección de 2024 lo vamos a demostrar.
- La digna derrota de Massa: A pesar de ir arriba en todas las encuestas previas, Massa salió a reconocer dignamente su derrota y felicitó a Milei por su triunfo. “Los resultados no son los que esperamos. Me comuniqué con Milei para desearle la mejor de las suertes porque es el presidente que eligieron los ciudadanos. Y lo hice convencido de que lo más importante que debemos dejar a los argentinos es el mensaje de que la convivencia es el mejor camino”, dijo Massa.
En tal sentido, me pregunto si en 2024 Claudia Sheinbaum tendrá esa dignidad para reconocer su derrota. Pero conociendo a su patrón y a toda la borregada de la que se está rodeando, les puedo adelantar que no será así. Tenemos que estar preparados para defender nuestra victoria en 2024.
- La alternancia política en América Latina: Con la elección presidencial de Argentina se refuerza la tendencia electoral a la derrota de los candidatos oficialistas en nuestra región. En todas las elecciones presidenciales que se han celebrado desde 2019, con excepción de Paraguay (2023), ha ganado un candidato opositor.
México no será la excepción, el voto de castigo al gobierno de López Obrador será decisivo en las siguientes elecciones. Somos mayoría los que estamos en contra de un gobierno que se ha dedicado a desmantelar nuestra democracia, que se ha convertido en el sexenio más violento de nuestra historia y que se ha destacado por su indolencia ante las tragedias.
Del tingo al tango, de izquierdas radicales a ultraderechas, la ciudadanía desesperada busca pasar de un espectro político a otro con la intención de elegir el mal menor, aunque eso abra la puerta a tiranos populistas. Los mexicanos lo sabemos bien, llevamos cinco años viviéndolo en carne propia.
Desde que inició su gobierno, López Obrador ha impulsado el odio y la polarización. Deseaba que la oposición pusiera de candidato a un Bolsonaro, un Trump, un Bukele o un Milei y no fue así, con gran responsabilidad hemos escogido a una mujer socialdemócrata para que nos represente en 2024. Seguro estoy de que ganaremos y que le pondremos un alto al autoritarismo.