El sujeto que mató por envenenamiento a los perritos Athos y Tango, en la Capital de Querétaro, fue sentenciado a 10 años de prisión y una indemnización de casi 2.5 millones de pesos.
De manera inédita por el sacrificio de manera cruel de un animal de compañía y en este caso por tratarse de perros entrenados para rescate de personas, un juez decretó la prisión del responsable a 10 años y seis meses de prisión.
Vicente Benjamin, escuchó la sentencia de la juez que llevó el caso y que tuvo que ver con una indemnización por la muerte de Athos que alcanza los 2 millones 145 mil 479 pesos, debido a que se trataba de un perro adiestrado para rescate de personas.
Por la muerte de Tango, la indemnización fue tasada en la cantidad de 223 mil 548 pesos, mientras que la reparación del daño moral fue por 50 mil pesos.
Al sujeto implicado también se le suspendieron derechos civiles y políticos y una amonestación en privado.
Para determinar la sentencia, la juez consideró a los animalitos como integrantes de una familia y herramienta de trabajo, debido a que eran utilizados para actividades de rescate y altruista, ya que Tango era pieza fundamental para el apoyo de terapias y contaban con certificaciones internacionales que los avalan.
Se trata de la primera sentencia de esta naturaleza que un juez de la causa fija por la muerte de dos perritos, por lo que se convertirá en un parteaguas para el castigo de maltrato animal en el Estado y el país.
por Martín García Chavero