En un contexto donde la tensión internacional se encuentra en uno de sus puntos más álgidos, la posibilidad de un conflicto nuclear emerge como una amenaza palpable. En entrevista exclusiva para NotiPress en Ciudad de México, Beata Wojna, exembajadora de Polonia en México y experta en relaciones internacionales del Tecnológico de Monterrey, arroja luz sobre el discurso nuclear del presidente ruso Vladimir Putin que insinúa la disposición de Rusia para emplear armas nucleares en el escenario actual.
Desde la invasión a Ucrania a finales de febrero de 2022, el discurso nuclear ganó prominencia, revelando un cambio significativo en la postura estratégica rusa. Putin declaró en una entrevista días antes de ganar las elecciones, que el arsenal nuclear del país se encuentra en alerta, marcando un precedente respecto a su política anterior. Este anuncio reafirmó la capacidad militar rusa y fue un recordatorio a Occidente de las líneas rojas que no deben cruzarse.
Por su parte, el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) mantiene un férreo monitoreo en Rusia y diálogo permanente, “la tardea de la OIEA es evitar lo peor”, declaró Rafael Grossi, director general. Rossi mantuvo una reunión de 60 minutos con Putin y compartió, el actuar del Organismo es disuadir y garantizar la seguridad nuclear ante tensiones globales.
Según Wojna, Rusia distingue entre armas nucleares estratégicas, capaces de alcanzar objetivos distantes, y tácticas, diseñadas para el uso en el campo de batalla. Aunque las tácticas tienen un alcance más limitado, su uso podría tener consecuencias devastadoras, sin desencadenar una catástrofe nuclear de gran magnitud. La contemplación de su uso en el frente ucraniano pone en relieve la gravedad de la situación.
“Es importante […] tomar en consideración de que en caso de que Rusia usara las armas nucleares tácticas, la respuesta del Occidente sería usar las armas convencionales, no armas nucleares tácticas, granada, porque eso generaría una escalada obviamente en el conflicto y podría llevar a, pues, básicamente escenarios difíciles incluso de imaginar”, Wojna
La respuesta de Occidente ante la posible utilización de armas nucleares tácticas por parte de Rusia sería decisiva. La OTAN, según Wojna, emplearía armas convencionales en lugar de recurrir a su propio arsenal nuclear, evitando así una escalada hacia un conflicto nuclear total. Esta mirada hace énfasis en la delicada balanza de poder y la importancia de mantener un equilibrio para evitar una catástrofe.
Para Wojna, la complejidad de la geopolítica actual lleva al extremo a la diplomacia al servicio de la prevención de una escalada nuclear. “Quizás la línea roja es la presencia de las fuerzas armadas de otros países del occidente en el territorio de Ucrania para luchar contra Rusia”, refiere la especialista en relaciones internacionales del Tecnológico de Monterrey. A medida que las “líneas rojas” parecen ser móviles y ambiguas, la comunicación clara y la contención emergen como herramientas esenciales en el manejo de la crisis.
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