Ante los desafíos que surgen respecto al potencial de la inteligencia artificial para causar daño social como fraude, discriminación y desinformación, el Gobierno de Estados Unidos emitió nuevas políticas y principios en torno a la IA. La orden ejecutiva, emitida por Biden, exige a departamentos, agencias y ejecutivos apegarse a diversos estándares. Todo esto tiene el objetivo de que Estados Unidos lidere el camino sobre la gestión de riesgos en torno a la IA.
Estos nuevos estándares se basan en ocho principios rectores y prioridades. Entre los cuales destacan proteger la privacidad de los estadounidenses, promover la equidad de derechos, así como la innovación y competencia en Estados Unidos.
De acuerdo con The Verge, la orden ejecutiva se centra principalmente en establecer las marcas de aguas en contenidos generados por IA como un requisito obligatorio. Aunque el medio considera esta medida como una iniciativa prometedora, sostienen, basados en opiniones de expertos, las marcas de agua pueden no ser tan fiables.
Para argumentar esta aseveración, The Verge cita un estudio de Google, en el cual describen que los métodos de alta perturbación tampoco son inmunes a manipulaciones extremas. Estos procedimientos consisten en incrustar marcas de agua digitales en los píxeles y metadatos de los contenidos generados por IA. Sin embargo, esta codificación puede ser vulnerada e incluso alterada.
De forma similar, la orden solicita al Departamento de Comercio desarrollar estándares para detectar y rastrear contenido sintético en la web. Ejemplo de ello es el ícono de transparencia generado por Adobe. Este ícono permite que al colocar el cursor en dicho ícono, se muestre información sobre cómo y con qué herramienta se produjo la imagen.
El eje rector de estos estándares es promover la innovación, competencia y colaboración para desbloquear el potencial de la tecnología y resolver desafíos que implica el uso de IA. A su vez, promueve el uso responsable de la tecnología para apoyar a los trabajadores estadounidenses. Del mismo modo, las políticas buscan robustecer la equidad y derechos civiles y proteger los intereses de los estadounidenses.
Por otra parte, establecen la obligación del gobierno federal para gestionar los riesgos por el uso de IA y guiar los esfuerzos para proteger la privacidad y libertad civil de la población. Finalmente, el octavo principio, establece la responsabilidad del gobierno de Estados Unidos de liderar el camino económico y tecnológico hacia el progreso social.
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