El 98 por ciento de trabajadores de Nómina 8, honorarios, galenos e interinatos de la Secretaría de Salud de la Ciudad de México iniciaron su transición al IMSS Bienestar. De esa manera, a partir del 1 de septiembre seis mil 125 empleados de ese sector iniciarán su prestación de servicios ya contratados como IMSS Bienestar.
Olivia López Arellano, titular de la Secretaría de Salud capitalina, destacó que en esta primera fase de transición se garantiza la mejora de las condiciones del sector. De esa manera, los trabajadores tendrán su plaza de base, plaza definitiva que les da cobertura, estabilidad laboral, prestaciones de ley y una mejoría salarial.
Ellos ya serán contratados a partir del 1 de septiembre para empezar sus pagos el 15 de septiembre. Mejorando sus condiciones laborales, desde luego sus prestaciones, un incremento salarial, también con un reconocimiento importante con sus cotizaciones al ISSTE y sobre todo van a ser plazas federales”, puntualizó.
Por medio de esta modalidad, se prevé una mejora salarial de hasta el 20%, principalmente en el caso de médicos y personal de enfermería. Sin embargo, los otros empleados de diversos sectores también percibirán un incremento en su salario.
Comentó la funcionaria que el 2% restante podría sumarse a la transición en las próximas semanas.
Continúa avanzando IMSS-Bienestar en CDMX
La transición de la Secretaría de Salud capitalina al IMSS-Bienestar inició el 28 de septiembre del 2022 con la inauguración del Hospital General IMSS-Bienestar Cuajimalpa. El objetivo es impulsar la política cero rechazos, con la cual se busca garantizar la gratuidad universal de atención médica, así como entregar medicamentos a los capitalinos.
Si bien, la primera fase ya concluyó, la transición es un proceso largo que comenzó con el diagnóstico de unidades médicas. Un total de 160 centros de salud están siendo intervenidos en términos de mantenimiento mayor, para ir transitando al IMSS-Bienestar y dejar las unidades en las mejores condiciones posibles, detalló la funcionaria.
De acuerdo con López Arellano, la inversión para el mantenimiento es de 522 millones de pesos, los cuales provienen del Fonsabi. Según lo estimado, para finales del 2023 estará para dar paso a la entrega de todas las unidades, infraestructura y recursos de la Sedesa al IMSS-Bienestar.
Esta transición contará con cuatro etapas y cuatro dimensiones: infraestructura, equipamiento, plantilla laboral y asegurándose del abasto, comentó la funcionaria.
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