Las fuerzas del orden italianas detuvieron este martes a tres hombres sospechosos de pertenecer a una organización criminal que ayudaba a terroristas a cruzar países europeos y cuya actividad estaba vinculada con el atentado que en 2016 causó doce muertos tras un atropello masivo en Berlín.
Los tres detenidos son de origen tunecino y están acusados de conspiración por ayudar e instigar a la inmigración ilegal con el agravante de transnacionalidad. Dos de ellos permanecerán en prisión preventiva mientras que el tercero lo hará en arresto domiciliario.
“Las relevantes actuaciones de la Policía del Estado, gracias a las cuales ha sido posible desarticular una peligrosa red criminal que facilitaba la entrada ilegal de extranjeros en Italia, permitieron descubrir que entre ellos se encontraban también individuos relacionados con circuitos yihadistas”, indicó en una nota el ministro del Interior, Matteo Piantedosi.
La investigación sobre esta red comenzó hace siete años, después de que el autor del atentado, Anis Amri, fuera localizado días después del atropello en la periferia de Milán, donde murió abatido por un agente tras disparar a su compañero.
Los investigadores alemanes supieron la identidad del atacante al encontrar unos documentos bajo el asiento del camión que conducía, que dieron la pista sobre su presencia en Italia, ya que llegó a Alemania desde el país mediterráneo.
Durante la operación policial se llevaron a cabo 44 registros contra 18 sospechosos de diversos delitos y otras 26 personas en las provincias italianas de Ancona, Fermo, Ferrara, Catanzaro, Módena, Macerata, Siracusa y Verona.
EFE