Autoridades mexicanas dejaron en libertad este martes a la persona que habían detenido como presunto responsable del asesinato de las periodistas Yesenia Mollinedo Falconi y Sheila Johana García Olvera, a quienes mataron el pasado 9 de mayo en el oriental estado de Veracruz, al comprobarse “que se trató de un homónimo”.
El sujeto identificado como Antonio de Jesús “N”, había sido capturado por agentes de la Coordinación Nacional Antisecuestros y de la Fiscalía General del Estado de Veracruz (FGE) y se anunció su detención de manera oficial.
Pero horas más tarde, en un mensaje en redes sociales, las autoridades informaron del error en la detención.
“Al validar su identidad por esta fiscalía y determinar que se trató de una homonimia, fue puesto en libertad de inmediato para evitar vulnerar sus derechos”, anunció la FGE.
Horas antes de ser puesto en libertad, un grupo de repartidores de comida rápida se manifestaron frente a la sede del Poder Ejecutivo para denunciar que Antonio de Jesús había sido detenido injustamente.
Los inconformes, compañeros de trabajo del detenido, revelaron que el joven es un estudiante de un tecnológico y que el día que ocurrieron los crímenes se encontraba en la ciudad de Xalapa, a más de 300 kilómetros de distancia del lugar de los hechos
Primeramente, la Fiscalía de Veracruz había reportado la detención de Antonio de Jesús “N”, alias “El Mara”, a quien señalaron como presunto responsable del delito de homicidio doloso calificado.
En ese primer momento, el detenido fue considerado como presunto responsable del crimen de Mollinedo Falconi, directora del portal El Veraz, y de García Olivera, reportera del mismo medio de comunicación, asesinadas en el municipio de Cosoleacaque, en el sur del estado de Veracruz.
Además, indicaron que sería presentado en audiencia inicial ante el juez de proceso y procedimiento penal oral para que se defina su situación jurídica; es decir, se determine si es legal la aprehensión y, posteriormente, si es acusado.
Tras el crimen, las autoridades mexicanas revelaron que seguían cuatro líneas de investigación, dos de ellas relacionadas con los primeros indicios que se levantaron en el lugar de los hechos.
Otra más tiene que ver con la actividad que desarrollaban las víctimas en el medio electrónico, y la cuarta está relacionada con la filtración de unos audios.
Con Mollinedo y García sumarían once los periodistas asesinados en México en lo que va de año, si se comprueba que sus muertes se produjeron en relación con su labor, según organizaciones nacionales de periodistas.
Sin embargo, la Secretaría de Seguridad del Gobierno de México solo reconoce 9 casos este año, con 19 presuntos responsables detenidos o buscados, y 16 vinculados a proceso penal.
Según cifras de la organización Artículo 19, desde que el presidente Andrés Manuel López Obrador llegó al poder, en diciembre de 2018, se han contabilizado 1.945 agresiones contra la prensa en el país, incluyendo 33 asesinatos, y 2 desapariciones, un 85 % más que en el primer trienio del presidente Enrique Peña Nieto.
EFE