Por Raymundo Moreno Romero
Los primeros días de David Monreal Ávila (Morena) al frente del gobierno de Zacatecas han estado marcados por la incertidumbre, la decepción de no pocos de quienes se adhirieron a su proyecto y la confirmación de la ausencia de un plan integral, incluyente y novedoso para afrontar los añejos problemas que aquejan a las y los zacatecanos.
David Monreal es un hombre interesante, siempre bajo la sombra de su poderoso hermano, accedió a espacios de toma de decisión que seguramente le permitieron contar con un diagnóstico claro sobre la realidad de la entidad que por 18 años buscó gobernar. Lo mismo como Alcalde del lastimado mineral de Fresnillo, que como Senador de la República o Coordinador de Ganadería, el hoy Gobernador constitucional de Zacatecas tuvo acceso a información y recursos privilegiados, luego, el que su primer mensaje se viera marcado más por la queja, que por las alternativas de solución, pareciera el prólogo de un fracaso anunciado.
En las primeras horas de la nueva administración sorprendió que el Gobernador por un lado reconociera, no sin un dejo de amargura, la quiebra de las finanzas públicas, así como la incuestionable violencia que aqueja a muchos municipios del estado, y por el otro decidiera ratificar justamente a los secretarios de seguridad pública y finanzas de Alejandro Tello. ¿Por qué refrendar a los funcionarios encargados de atender los principales elementos de la llamada “herencia maldita”?, ¿acaso se trató de un acuerdo de mayor envergadura o simplemente del pago por los favores de dos integrantes del anterior gabinete que “se la jugaron” con el monrealismo?
La “nueva” gobernanza, aderezada por un logotipo criticado por lúgubre, han sido el centro de la comunicación política de la naciente administración zacatecana, no obstante, el discurso parece hueco cuando en los hechos no hay mayores cambios en la política pública o en los personajes que ocupan cargos de primer nivel. Mención especial merece el flamante secretario de salud, un hombre señalado por irregularidades, acoso laboral y corrupción.
Era de esperarse que los recientes nombramientos, mismos que van cayendo a cuenta gotas a pesar del largo y tortuoso periodo de transición, no fueran del agrado de la oposición, lo que levanta cejas es el rechazo que han causado al interior de los diferentes grupos de Morena, donde personajes como Omar Carrera pareciera que se sienten desplazados en sus legítimas aspiraciones.
Siempre es posible corregir el rumbo, los retos que hoy debemos sortear cientos de miles de zacatecanas y zacatecanos exigen de generosidad, compromiso, creatividad y humildad. Ojalá que el gobernador y su equipo, tanto el formal, como el que no aparece en la nómina del gobierno del estado, asuman esta realidad y den pasos hacia una genuina nueva gobernanza, y no sigan por el camino de la inercia burdamente simulada.
Refilón: al menos en lo que toca a la propuesta de presupuesto de egresos 2022 presentada por el Secretario de Hacienda a la Cámara de Diputados, la cercanía entre David Monreal y el Presidente de la República no se tradujo en beneficios para el estado. Agraciadamente a finales de la próxima semana se estará presentando el proyecto de presupuesto alternativo de Va Por México donde, entre otros elementos, se busca restablecer el Fondo Minero. Al tiempo.
