Luego de que el Congreso de Quintana Roo incumpliera el acuerdo de dictaminar las iniciativas en materia de despenalización del aborto, las integrantes de la Red feminista quintanarroense decidieron tomar totalmente el recinto legislativo y llamaron a firmar nuevos acuerdos.
Ayer, 24 de febrero, venció el plazo para que el Congreso de Quintana Roo entregara a las feministas un dictamen para la despenalización del aborto en la entidad. En contraparte, la Red se había comprometido a abandonar las instalaciones del recinto legislativo en el que permanecen desde hace 92 días a modo de protesta.
Estos compromisos quedaron establecidos en un acuerdo que firmaron las diputadas con las feministas el pasado 11 de febrero.
No obstante, durante todo el día de ayer, las y los diputados no consiguieron aprobar el dictamen e incumplieron el acuerdo. Cerca de las 11 de la noche, hora local de Quintana Roo, las Comisiones Unidas de Puntos Constitucionales, de Justicia, de Salud y Asistencia Social, de Derechos Humanos y Para la Igualdad de Género (a cargo de la dictaminación) tuvieron que interrumpir la sesión por falta de quórum, toda vez que las diputadas Reyna Duran Ovando, Presidenta de la Junta de Gobierno y Coordinación Política del Congreso y sin partido; Kira Iris San del Partido Acción Nacional; Carlos Hernández Blando, del Partido Revolucionario Institucional (PRI); y la diputada Aurora Pool Cauich, también de Acción Nacional abandonaron la discusión.
La ausencia de estos diputados sólo fue el colofón de una jornada de intervenciones exhaustivas, ausencias y alegatos técnicos.
Por ejemplo, las y los diputados atrasaron por cerca de dos horas la discusión porque varios de ellos (algunos que no formaban parte de las Comisiones que votarían, como el diputado Toledo Medina, José Luis) pedían que, aunque se les había leído, se les entregara en físico una copia del dictamen. Por esta petición, el Congreso se fue a receso por casi una hora.
Ya en el cierre de la jornada, una vez que regresaron las Comisiones, la discusión se centró en eliminar o no del proyecto de decreto una reforma constitucional para modificar el artículo 13 de su carta magna, en el cual “se protege la vida desde la concepción”. En específico, los diputados Eduardo Martínez Arcila y Reyna Durán solicitaron reiteradamente la palabra para pedir que no se eliminara esa reforma constitucional.
De acuerdo con Yunitzilim Rodríguez Pedraza, integrante de Marea Verde Quintana Roo, que es una de las 26 organizaciones que conforman la Red, estas intervenciones y retrasos fueron consecuencia de una operación política del gobierno de la entidad cuya intención era retrasar el debate, ya que incluir una reforma constitucional en el dictamen requeriría que éste fuera votado por las tres cuartas partes de las y los diputados que integran el Congreso, más la aprobación en la mayoría de los municipios de Quintana Roo.
Por todo esto, explicó la defensora en entrevista, las feministas decidieron este 25 de febrero hacer la toma completa del Congreso y terminar la mesa de negociación que habían entablado con el gobernador de la entidad, Carlos Joaquín González.
Con ello, la Red exigió que el debate por el derecho a decidir de las mujeres escale al ámbito federal, que se haga un nuevo dictamen que no incluya la reforma constitucional y que se suscriba un nuevo acuerdo para que se proponga una nueva fecha de discusión.
En un comunicado, la Red feminista agradeció el trabajo de las diputados y diputadas que permanecieron en la sesión con el objetivo de trabajar a favor de los Derechos Humanos, entre ellas a la presidenta de la Comisión de DH, Judith Rodriguez Villanueva; el morenista Edgar Gasca Arceo, Tyara Schleske, del Partido Verde; Erika Castillo, de Morena; Hernán Villatoro, del Partido del Trabajo; Iris Mora Vallejo, del Partido de la Revolución Democrática; Jose Luis Guillen, de Movimiento Auténtico Social; José de la Peña, también del Partido Verde; y Ana Pamplona, del Partido del Trabajo.
CIMAC
