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lunes, noviembre 25, 2024

La Duda

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Por Jesús Ortega Martínez

Han transcurrido dos años del gobierno del presidente López Obrador, y el aniversario hay que recordarlo, debido a que es el periodo que se dio, así mismo, el presidente López Obrador, para dar cumplimiento a la enorme cantidad de compromisos que hizo durante la campaña electoral que le llevó a la presidencia de México. Tales compromisos los cerró, simbólicamente, en la cantidad de cien, de los cuales, afirma de manera increíble, que ya cumplió 97 y que le restan por cumplir solo tres más. 

Su afirmación es increíble, porque cualquier observador que cuente con elemental objetividad, se dará cuenta, de que la situación del país no solamente no ha mejorado, sino que ha empeorado en casi todos los aspectos de la administración pública federal. 

No ha cumplido con los compromisos políticos y administrativos adquiridos, sino que, en términos generales, la situación en algunos de los problemas más delicados del país, se ha vuelto desastrosa. 

Es el caso, por ejemplo, de la crisis que se agudiza en el sector salud a pesar de su compromiso de asegurar que en dos años habría, para todas y todos los mexicanos, el acceso gratuito a la salud de calidad. El presidente dice que esto se ha resuelto satisfactoriamente y que ya nadie podría quejarse porque no tenga acceso al derecho a la salud. 

Cierto que nadie contábamos con la presencia de la pandemia, pero el gobierno afirmó que se encontraba preparado para enfrentar el escenario más complejo. La realidad es que minimizó la pandemia, pero sus recortes presupuestarios aceleraron la debacle. Hoy hay un sector salud postrado e incapaz de atender lo básico menos aun lo extraordinario.  

El derecho a la salud de calidad está garantizado para todas las personas, dice el presidente. ¿Como puede decir eso, cuando no ha crecido la infraestructura hospitalaria y la que existía se ha deteriorado; cuando no hay suficiente personal médico y hospitalario y el que existe ha sido, injustamente, maltratado por el gobierno; cuando hay una enorme carencia de medicamentos básicos y más aún en aquellos para atender enfermedades catastróficas como diabetes, cardiopatías, sida, cáncer

¿Como puede, el presidente, afirmar que ha resuelto la crisis del sector salud, cuando muchas personas, especialmente niñas y niños, fallecen por falta de medicamentos; ¿como si el IMSS, el ISSSTE, y todo el sistema público de salud del gobierno no provee ni de los medicamentos ni de los recursos económicos mínimos para satisfacer la creciente demanda? ¿Como, si las mamas y los papas de los infantes con cáncer se han visto obligados a ampararse ante los jueces para obligar a las autoridades a que apliquen las quimioterapias, que son, literalmente, vitales? 

Sucede los mismo con otras enfermedades y con millones de personas que no pueden acceder a la salud por causa de la irresponsabilidad, la indolencia criminal del gobierno. 

Pero como sucede con la salud, sucede con otros derechos humanos fundamentales, como el empleo digno y bien remunerado; la educación de calidad; la alimentación suficiente y nutritivamente sana; la seguridad; la justicia, la igualdad jurídica, y el acceso a una vida libre de violencia para todos, y especialmente para las mujeres. 

¡No! No ha cumplido el presidente sus compromisos de campaña, y su labor ha sido tan deficiente y tan pletórica de fallas y errores, que el balance a dos años de asumir el poder, es de una auténtica catástrofe. 

La gran duda que tenemos la mayoría de la población, no es si ha cumplido el presidente, pues es obvio que no. La duda estriba en entender:  ¿cómo es que alguien –especialmente si es presidente de México– puede mentir con tal grado de cinismo,  como lo hace López Obrador?  

¿como puede ser tan inconsciente, que logre abstraer su pensamiento, del hecho de causar tanto daño a millones de personas? 

¿como puede presumir que duerme con placidez, cuando millones de mexicanas y mexicanos sufren debido a la incapacidad de su gobierno? 

¿Como puede decir que la pandemia “le cayó como anillo al dedo” si no lo sea solo,  para tenerla como pretexto y con el cual intentar ocultar, ante los ojos de la gente, su completa inoperancia?

Esta duda, no lo pierdan de vista, pues está ya presente entre muchas personas, pero se alojará, día con día, en la mente de cada vez más, mexicanas y mexicanos. 

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