Por Isaac Arvizu Espinosa
Recientemente hemos escuchado el término “pacientes de mayor riesgo” ya que son personas mayormente vulnerables por contagiarse de covid-19, entre esa población se encuentran personas de la tercera edad, hipertensos, diabéticos, fumadores, personas con cáncer, entre otros.
Sin embargo, poco se ha dicho sobre una población (personas con VIH) con relación a un virus epidemiológico, el VIH, que antes del nuevo coronavirus, se ha manifestado en México a causa del desabasto de medicamentos, que hace meses le había vulnerado su derecho a la salud, tutelado en el artículo 4° de nuestra carta magna y en la Ley General de Salud, así como en los respectivos documentos jurídicos que salvaguardan este derecho.
En la nación mexicana hay un desabasto de medicamentos antirretrovirales para el tratamiento contra el VIH y otros medicamentos en general; Organizaciones, activistas y personas con VIH se han manifestado en las calles para demandar el abastecimiento de tratamientos y medicamentos.
El desabasto de medicamentos data de antes de la pandemia por covid-19, incluso desde el año pasado y son las personas con VIH, sin sus medicamentos, personas de mayor riesgo, no solo de contagio, sino de muerte inminente, en caso de contagio por el nuevo coronavirus.
En los centros de salud les han dicho que los medicamentos se encuentran sin existencia o no surtido, según manifiestan en sus protestas; hay que entender cómo funciona el VIH, ya que el virus afecta gradualmente el sistema inmune al atacar los linfocitos CD4, principales glóbulos que protegen al cuerpo de una infección, el virus utiliza a los linfocitos y comienza a reproducirse, es un ciclo denominado de VIH.
El virus de inmunodeficiencia humana tiene prevención y tratamiento antirretroviral que se suministra diariamente, sin estos medicamentos el virus se multiplicará en los pacientes, que al encontrarse debilitado el sistema inmune pueden contagiarse de cualquier enfermedad, haciendo más riesgoso su tratamiento; En ese sentido las personas con VIH se encuentran en mayor riesgo, ya que, si se llegan a contagiar les puede representar un grave riesgo para su salud y su vida.
Según las estimaciones de ONUSIDA, hay casi 38 millones de personas con VIH.
(29 nov. 2019) y 1.663.137 (9 abril 2020) casos confirmados de covid-19, la pregunta es ¿Cuántos de esos casos de Covid-19 tienen además VIH? Y ¿Qué soluciones se darán para satisfacer las demandas del pueblo ante el desabasto de antirretrovirales?
Todo esto sin olvidar que hay una gran cantidad de personas que por razones económicas no pueden dejar de salir a las calles y entre esas personas, pacientes con VIH, ante esta situación el CENSIDA ha dispuesto medidas adicionales para estos mencionados pacientes.
El ejecutivo Federal por parte de la Secretaría de Salud como lo establece el artículo 73 constitucional fracción XVI debe dictar inmediatamente medidas preventivas indispensables en estos casos y no desatender las medidas para la prevención y control por VIH contenidas en la NORMA OFICIAL MEXICANA NOM-010-SSA2-1993, PARA LA PREVENCIÓN Y CONTROL DE LA INFECCIÓN POR VIRUS DE LA INMUNODEFICIENCIA HUMANA y la demás regulaciones con relación a este tema,así como dar especial atención a este sector de la población que ha quedado invisibilizado tras la pandemia y constituyen un grupo de mayor riesgo ante el coronavirus.
Isaac Arvizu Espinoza. Estudiante de derecho y activista LGBT.